Del deporte a la política: atletas en puestos de elección popular

l deporte, a pesar de no ser catalogado un asunto primordial para la vida de un país como muchos otros temas considerados fundamentales, acapara la atención de mucha gente que está más al pendiente de la actividad semanal de su disciplina favorita que de la agenda nacional. Aunque estigmatizado por muchos detractores debido a esta razón, el deporte, a causa de su arrastre popular, también ha sido aprovechado por gobernantes y partidos políticos para lanzar a algún atleta de éxito como candidato a un puesto de elección popular y así atraer a aquellos ciudadanos que siguen su carrera y obtener para dicha organización, por ejemplo, desde una diputación o alcaldía hasta una gubernatura o la mismísima presidencia de un país.

Por supuesto, este no es un fenómeno exclusivo de ninguna nación en específico ni tampoco de una determinada ideología política, pues a lo largo de los años se ha replicado con diferentes resultados tanto para las organizaciones que los postulan como para los ciudadanos.

Igualmente, muchos analistas políticos ven en este tema el simple aprovechamiento del impacto popular de un atleta y regatean sus capacidades, preparación académica y convicciones, pero olvidan que, independientemente de la influencia que puedan tener en el electorado por su fama y la simpatía que despierten por su actividad deportiva, los atletas también son ciudadanos a quienes les preocupa el bienestar de su comunidad y tienen el derecho de participar en la vida política de su nación.

Muchos son los ejemplos de deportistas que han incursionado en la política, tanto en México como en otras naciones, a distintos niveles y con diversos resultados. Aquí mencionaré solo tres que han tenido un alto impacto social porque en su tiempo fueron grandes figuras de sus disciplinas y después alcanzaron altos puestos, donde no se salvaron de ser blanco de críticas y polémicas por su desempeño.

George Weah

Este exfutbolista liberiano, nacido en 1966, tuvo una brillante trayectoria en equipos franceses como el Mónaco, Paris Saint-Germain y Olympique de Marsella, en los ingleses Chelsea y Manchester City y en el italiano Milán, además de haber sido seleccionado de su país. Es uno de los mejores delanteros de África de todos los tiempos y, hasta ahora, el único jugador de ese continente en ganar el Balón de Oro, en 1995. Fue embajador de buena voluntad de la UNICEF y se retiró de las canchas en 2003. Fue entonces que se enfocó en hacer una carrera política. Apoyado por la gente que disfrutó de sus goles y campeonatos en el balompié europeo, tras dos intentos fallidos, ganó la presidencia de Liberia, de la que tomó posesión en 2018 y actualmente ocupa. No obstante su popularidad, se le ha criticado por sus pobres resultados en materia económica, entre otros rubros.

Arnold Schwarzenegger

Nacido en 1947 en Austria pero nacionalizado estadounidense, es considerado por muchos la máxima figura del fisicoculturismo de todos los tiempos. Ganador del Mister Olympia en siete ocasiones en la década de los 70, una vez retirado del deporte profesional, desarrolló una prolífica carrera en el cine de Hollywood, donde se le recuerda principalmente por la saga de “Terminator”. Arnold sorprendió al mundo cuando, en 1988, apareció en un mitin del entonces vicepresidente de Estados Unidos, George W. Bush. Fue así como mostró su apoyo al Partido Republicano de aquel país, del que fue candidato y gobernador de California durante dos periodos, de 2003 a 2011. Envuelto en la polémica por su postura inicial contra el matrimonio homosexual, también se le aplaudió haber renunciado a su sueldo de 175 mil dólares anuales como mandatario. Luego de su aventura en la política, el Governator retomó su carrera cinematográfica.

Cuauhtémoc Blanco

El exdelantero del América y la selección nacional mexicana, nacido en 1973, fue todo un ídolo por sus goles, talento y entrega en la cancha, pero también un personaje polémico por ciertas actitudes, declaraciones y rivalidad con otras figuras del balompié nacional. Incluso antes de colgar los botines, en 2016, incursionó en la política un año antes, cuando obtuvo la presidencia municipal de Cuernavaca con el Partido Socialdemócrata, triunfo no exento de polémica al cuestionarse su residencia en el estado de Morelos durante el plazo establecido por la ley para poder ser candidato, pues en ese momento parecía no cumplir el requisito. En 2018, ya como abanderado del Partido Encuentro Social, ganó la gubernatura del estado, cargo que ocupa actualmente y donde también se ha visto en el ojo del huracán por sus presuntos vínculos con miembros del crimen organizado.

Con estos ejemplos, los aficionados pueden hacerse una idea de los resultados en el servicio público de algunos personajes otrora figuras deportivas y juzgar si su labor ha sido igual, mejor o peor que la de los políticos de oficio.

Author: Jose Alejandro Carro
Redactor, escritor reflexionando sobre deporte y otras formas de comunicacion Profesional dentro y fuera del campo