Actualmente, el futbol profesional es un negocio que, a través de la venta de camisetas de selecciones y clubes que cada año cambian de modelo para que los aficionados lo busquen con desesperación, la transmisión de partidos o torneos completos vía streaming y publicidad asfixiante que incluso dificulta apreciar la repetición de un gol por televisión, se encarece y explota la pasión de los fanáticos para cubrir las nóminas de los grandes equipos, que pagan exorbitantes sueldos a sus estrellas y precios equiparables al presupuesto anual de secretarías de Estado para fichar a la figura del momento.
En tiempos en que el futbol, deporte del pueblo y de la tierra, pierde su humildad e inocencia, aún quedan testimonios del antiguo propósito de este juego: la diversión pura, la pasión por la pelota, lejos de la obligación de conseguir la victoria porque la gente no compra productos de un equipo perdedor, porque nadie irá al estadio ni verá sus partidos por televisión, con la consecuente falta de publicidad.
¿Y qué mejor medio de transmitir la alegría del futbol que la música? Entre las varias canciones dedicadas a este deporte, hablemos de “Fut callejero”, del grupo de rock mexicano La Maldita Vecindad y los Hijos del Quinto Patio. Este tema, incluido en su disco “Circular colectivo” (2009), habla del gusto de practicar el juego más popular del mundo en el barrio, donde se disputa la famosa cascarita, o en las canchas de tierra, donde se da el tradicional futbol llanero, del que grandes futbolistas han surgido.
La letra de esta rola menciona que es mejor patear el balón en estos escenarios que únicamente ver los partidos por televisión, como muchos, en efecto, prefieren: no solo ser meros espectadores sino partícipes de la pasión pambolera y jugar nuestro propio Mundial.
Es a la cancha de Palillo a donde la voz cantante acude para jugar con los amigos de la cuadra el “futbol llanero, fut callejero”, el “futbol esencia, futbol conciencia”, en el que no hay violencia, como, tristemente, en ocasiones se puede ver en los estadios, sino “pura diversión”.
Al partido descrito en la letra no pueden faltar el Pata Dura, el Tiro Loco y el Rey, habitantes del vecindario, así como el clásico taloneo entre los dos equipos para pagar el arbitraje. También está presente la narración de Radio Pirata, que transmite para los barrios aledaños el encuentro entre el Real Bañil y el Atlético Mandil, patrocinado por el Movimiento Alternativo de Pamboleros Amateurs y Asociados, que no admite el «futbol negocio» ni los comerciales.
El video que acompaña la melodía resulta igualmente interesante, con tomas iniciales que hacen homenaje al México prehispánico y escenas filmadas en canchas de tierra, lodosas, donde se vive la emoción del juego, que se contagia a la tribuna.
Busquen “Fut callejero” en el canal de videos que ustedes conocen y disfruten este tema, que nos recuerda con humor el principio fundamental de un juego que siempre ha pertenecido a la gente.