El Matador vence por KO a Max Holloway. El poder de puños de Topuria se hace
notar con una combinación de tres golpes, uno más devastador que el anterior,
cuyas víctimas tocan la lona al último. Claramente, Holloway no fue la excepción, y
es evidente que el poder en los puños del georgiano se manifiesta durante su
rápida y potente pegada. Semanas previas al combate, ambos mantuvieron en
tensión a los fanáticos, que ya anticipaban un nocaut y el resultado, nos guste o
no, genera una emoción sobre los siguientes combates y los resultados en este
evento numerado de UFC.
Recordemos que ambos venían de victorias espectaculares, cada uno con la
sorpresa de sus respectivas noches. Por un lado, Topuria logró noquear a
Volkanovski en la pelea por el campeonato, despertando gran expectativa sobre
sus próximas defensas y construyendo una base sólida de admiradores, tanto en
su país natal como en España, que le brindó asilo. Esto le ha dado una reputación
de estilo de pelea sumamente devastador. Por su parte, el hawaiano ha
cosechado dentro de la empresa una serie de victorias arrasadoras y grandes
momentos, como la pelea contra Yaír Rodríguez, el «Zombie coreano», y
Nurmagomedov, demostrando su nivel de boxeo y autoproclamándose el mejor
boxeador de la promotora, con Kattar y, más recientemente, el brutal nocaut
contra Justin Gaethje. Si bien su vasta experiencia dentro del octágono le ha
valido consagrarse como uno de los mejores y acumular un gran número de
seguidores, el enfrentamiento contra Topuria causó una expectativa dividida sobre
el resultado, claro antes del encuentro.
Aunque Holloway, en uso de su experiencia, supo mantener una distancia y un
juego inteligente en sus golpes, mantuvo el característico contraataque como una
ventaja. Tanto así que el georgiano comenzó a retroceder ante los golpes en el
segundo round. Así, evitó la posición en línea recta contra Topuria, salvándose de
los golpes de poder que seguramente lo habrían llevado a la lona desde el primer
round. Sin embargo, la suerte le jugó en contra, ya que en el tercer asalto un golpe
lo deshabilitó para un intercambio, favoreciendo a Topuria con el ground and
pound.
La estocada del matador no fue sorpresiva, más que para los fanáticos de
Holloway; con un izquierdazo logró una victoria que hizo temblar la Etihad Arena
en Abu Dabi, mostrando con un beso en la frente a un distinguido invitado: el Rey
Juan Carlos, emérito de España. Esta victoria para Ilia Topuria no es cualquiera,
pues mantuvo su invicto 16-0 y se convirtió en el primer peleador en noquear a
Holloway, un claro punto que lo distingue en su carrera.
Ahora, el reto no se detiene; en el ranking hay grandes rivales que pondrán a
prueba a Topuria. Uno de ellos es Diego Lopes, mencionado por Cormier, o una
posible revancha contra Volkanovski. El título puede retenerse por un buen rato
más o perderse junto con el invicto ante cualquier peleador del ranking. Solo
esperemos que la siguiente defensa de título ofrezca la misma emoción que
provocó este UFC 308.