En los últimos años, los productos para bajar de peso se multiplicaron. Las ganancias son millonarias, pero los beneficios de estos productos son dudosos.
Desde suplementos, complementos, productos llamados milagrosos que prometen curar todo. Además de productos, los servicios de planes de nutrición y alimentación que también tienen fallas al no considerar el entorno de alimentación con la relacion de temas emocionales o hasta de disponibilidad de alimentos frescos
Bajar de peso
Para bajar de peso se necesita algo más que el deseo de hacerlo, es necesario comprometerse y tener un plan bien planificado. Es decir, tomar la decisión de bajar de peso, cambiar de estilo de vida y volverse más saludable es un gran paso. Sin embargo, sucede que a muchas personas les cuesta bajar de peso haciendo dieta o cambiando su alimentación por otra saludable o con un plan para hacer actividad física de manera regular.
Los motivos para bajar de peso son muchos. En primer lugar, por algún tipo de enfermedad o por consejo de un profesional de la salud y entonces es necesario bajar de peso. En segundo lugar, por una cuestión estética de que la persona desea verse mejor al bajar de peso. En tercer lugar, la persona busca levantar su ánimo y al bajar de peso, logra una mejor versión de sí mismo y repercute en su autoestima. Finalmente, la persona piensa en los aspectos de su estilo de vida y pretende buscar un enfoque más saludable al bajar de peso.
El desafío de bajar de peso
Bajar de peso no es para cualquier persona ya sea por una cuestión de tiempo, de mentalidad o de capacidad física. Es por eso que se necesita un buen plan alimentario junto con una serie de ejercicios para poder bajar de peso efectivamente. Es decir, haber consultado con un profesional de la salud que haya evaluado el peso, la altura y los factores de riesgo relacionados con el peso. Además, que cerciore que se necesita bajar de peso. Luego haber planificado junto con un entrenador físico un plan a la medida de esa persona y con un seguimiento para monitorear los cambios en su peso, en su estética y en otras situaciones relacionadas con la salud.
Es conveniente establecer algunas metas a corto plazo para bajar de peso para ver si los esfuerzos realizados son correctos o no. La meta es a corto, mediano y a largo plazo, pero siempre con un plan en mente. Por ejemplo con metas concretas y simples de realizar para bajar de peso. Es conveniente ir avanzando de a poco y exigiendo un poco más metas con el transcurrir del tiempo porque el bajar de peso es un desafío en el que hay que ser muy paciente.
Para bajar de peso, la persona tiene que comer menos calorías y aumentar la cantidad de actividad física que hace cada día. No es solo entrenar más, sino que también el entrenamiento debe estar acompañado por un plan de alimentación saludable que reemplace las opciones menos saludables. Por ejemplo con una mezcla de frutas, vegetales, granos integrales, alimentos con proteína y productos lácteos bajos en grasa.
Sin embargo, algunas personas al ver que no obtienen resultados rápidos tanto en el peso como en la estética de sus cuerpos, optan por buscar la solución más fácil y rápida con los productos light o nutricionales para bajar de peso.
El negocio de bajar de peso
Debido a la globalización y a las distintas páginas online, es muy fácil encontrar dietas y productos disponibles para bajar de peso. También se observa las típicas frases: «Bajar de peso rápido: 30 kilos en 30 días», «Bajar de peso es más fácil con el plan X”, “Comprando el producto tal, bajar de peso es cosa de niños”. Sin embargo, cuesta creer en todos estos slogans vacíos. Las dietas o productos de moda no son la mejor manera de bajar de peso permanentemente. Este tipo de productos o dietas generalmente prometen un rápido éxito y hasta hacen que la persona reduzca estrictamente lo que come o evite ciertos tipos de alimentos. Seguramente en los primeros días la persona pierda peso, pero resulta difícil sostener este tipo de dieta o producto por mucho tiempo. Simplemente las personas se cansan al no obtener lo que esperaban y vuelven al mismo punto desde donde arrancaron con el mismo peso o más.
Cuando un producto dice «bajo en grasa» o «sin grasa» significa que es más bajo en calorías que una ración del mismo producto con toda su grasa. Sin embargo, hay muchos alimentos procesados que son bajos en grasa o sin grasa pero que tienen igual o más calorías que el mismo alimento con la cantidad completa de grasa. A estos alimentos a veces se le agregan otros condimentos como harina, sal, almidón o azúcar para mejorar su sabor y textura después de haber eliminado la grasa. Es decir, se le añade calorías al alimento. Es por eso que siempre se aconseja leer la información nutricional en la etiqueta y consultar con un profesional de la salud sobre estos alimentos. Mismo caso cuando encontramos esos “productos light” para bajar de peso cuyo valor energético ha sufrido una reducción del producto de referencia. Los productos light suelen tener cantidades similares de azúcar que las versiones de referencia y engordan igual. O sea, no ayudan a adelgazar y solo ayudan a que bajar de peso sea el negocio de cada año preferido por la industria alimentaria.
